Si te gustan los tatuajes, tienes alguno o está entre tus planes hacerte no te puedes perder el siguiente artículo.
Hace mucho tiempo que los tatuajes dejaron de ser un tabú en nuestra sociedad y que llevarlos es algo tan habitual como usar pendientes. Pero, ¿alguna vez os habéis preguntado si esos tatuajes están sujetos a derechos de autor? o ¿cómo se legisla Propiedad Intelectual en estos casos?
Como cualquier otra rama del arte, los tatuajes tienen que ser considerados bajo la misma regulación legal y moral que los protege. Es decir, si una pieza de las artes plásticas cuenta con una ley que la resguarda de ser imitada y que le concede la propiedad total de la obra, el arte del tatuaje debería adquirir el mismo derecho.
Los tatuadores suelen ser los creadores intelectuales del dibujo o diseño que reflejan en el cuerpo del cliente y por ello, son piezas de arte que corresponden totalmente a este artista. Pero no todos los tatuadores tienen los derechos de sus obras, para obtenerlos han de demostrar que ellos los han creado, es decir, deben ser originales, creativos y de carácter permanente. Adquirida la condición de obra original y creativa, el autor ostentará una serie de derechos económicos y morales.
Algunas de las cuestiones más frecuentes que se plantean con respecto a este tema son las siguientes:
Si la persona que tiene un tatuaje es famosa y hacemos una recreación suya, ¿estamos atentando contra los derechos de autor?
La realidad es que no puedes separar al tatuaje y la persona que lo lleva a tu antojo, entonces representarlo así no sería atentar contra sus derechos; el problema está en el momento en el que solo usas el tatuaje sin ese cuerpo. Este fue el caso del tatuador de Myke Tyson, que demandó a Warner Brothers por la película “Resacón en las Vegas 2”, película en la que el personaje de Ed Helms se despierta con el tatuaje que el famoso boxeador Myke Tyson lleva en su cara, grabado en su rostros también. En este caso, ha habido una separación del cuerpo y el tatuaje, por lo que sí que estaría atentando contra los derechos de autor.
¿El tatuaje es del tatuador o de la persona que lo lleva?
Es evidente que la autoría del tatuaje es del artista que lo diseñó, la cuestión se complica respecto al papel que tiene la persona tatuada. En personajes famosos es común que licencien su imagen en spots publicitarios de diversas marcas y con distintos fines de forma retributiva. En España, si se muestran las obras de los tatuadores en dichos anuncios tanto la persona como el tatuador podrían tener derechos sobre esa imagen. Pero hay que tener en cuenta que esto solo es aplicable cuando hay lucro.
¿Qué ocurre cuando es el diseño del tatuaje lo que se imita y no la reproducción del mismo?
En este caso solo entran en juego los derechos del artista, y si acudimos a la Ley de Propiedad Intelectual, el creador de la obra puede reclamar su derecho contra quien lo esté imitando. Así que podría denunciarse igual que cuando se reproduce el mismo.
Es decir, aunque nunca nos lo hayamos parado a pensar, hacernos un tatuaje puede tener cierto peligro. Debemos ser conscientes antes de tatuarnos de que el dibujo ha de ser original, y asegurarnos de que no estamos copiando indebidamente la obra de otro artista y no atentemos contra sus derechos de autor, porque ¿te gustaría ser pintor y que alguien imitase un cuadro tuyo y lo vendiese como suyo y encima se lucrase? Pues algo así pasa con los tatuadores. Son artistas como los demás, y hay que respetar y valorar su trabajo.