Para acudir a mercados exteriores, es fundamental la protección de la marca, planificar la logística de una manera eficiente, tener en cuenta el idioma y los sistemas de pago, entre otros.
Una de las características más notables del comercio electrónico es su carácter mundial. De hecho, la internacionalización es una de las estrategias clave de los ecommerce, considerados como uno de los instrumentos de crecimiento esenciales de las empresas.
Además de seleccionar los mercados, hay que considerar otros aspectos, como la protección de la marca, la moneda, la logística y el idioma, entre otros.
La clave está en la protección de la marca
Para acudir a mercados exteriores, es clave registrar la marca de los productos y servicios que se van a comercializar. Además de proteger la marca, se evitará tener problemas jurídicos y de comercialización en el país de destino, respecto a posibles derechos prioritarios de terceros.
- Para proteger una marca a nivel europeo, se debe hacer ante la EUIPO –Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea–. Esta distinción tiene efectos en todo el territorio de la UE y tiene una validez de 10 años. Además, no es necesario que exista una marca registrada con anterioridad en España.
- Para entrar en diversos mercados, la mejor opción es solicitar una marca internacional. Sin embargo, no es un registro válido en todos los países, sino que sólo es aplicable a aquellos integrados en el Sistema de Madrid, que son actualmente unos 80. Dicha protección se puede ampliar posteriormente a otros países miembros del sistema solicitando en cualquier momento una extensión territorial. Eso sí, es necesario que parta primero de una marca nacional.
- Por último, si se trata de países que no pertenecen a la UE o no son miembros del Sistema de Madrid, hay que registrar la marca en cada uno de ellos conforme a su legislación y requisitos.
Tampoco podemos olvidarnos de que hay que vigilar la marca para detectar solicitudes de otras semejantes.
Sistema de pago: el futuro está en el blockchain
Los sistemas de pago y la moneda son claves a la hora de internacionalizar el ecommerce. Por ello, es importante que todos los productos se presenten con la divisa del país. Eso sí, no todas las entidades van a facilitar la tarea.
¿El futuro? Integrar las criptomonedas como método de pago. Se trata de un sistema de pago avanzado basado en monedas virtuales, lo cual mejora la experiencia de usuario y aporta seguridad.
Otros aspectos a tener en cuenta en el plan estratégico
Además de proteger la marca, hay que disponer de una correcta protección de dominios territoriales en consonancia con la política de protección de marca. Asimismo, hay que vigilar los dominios para detectar posibles casos de competencia desleal.
También hay que planificar la logística de una manera eficiente. En este sentido, no podemos olvidarnos de los gastos de envío y analizar qué empresa de mensajería es la más adecuada. Para ello, lo idóneo es optar por empresas de mensajería consolidadas internacionalmente, que se encarguen de gestionar el paso por aduana y la entrega en domicilio.
El idioma es otro de los aspectos a tener en cuenta. En este punto, lo ideal suele ser adaptar los contenidos al idioma local.
Plataformas digitales con alcance global
Una opción para minimizar muchos aspectos, que hasta ahora eran decisivos en las estrategias tradicionales de internacionalización, son las plataformas online conocidas como marketplaces. Entre ellas, cabe mencionar Amazon, Ebay o Aliexpress, entre otras.
¿Las ventajas? Disminuye el tiempo de expansión, incrementa el conocimiento sobre los clientes, reduce los costes del proceso de ventas…