Con el objetivo de reforzar la actividad administrativa, que corresponde al Estado, en materia de propiedad intelectual de manera eficaz, se pone en marcha la creación de la Oficina de Derechos de Autor.
El Gobierno ha acordado, –a propuesta del ministro de Cultura y Deporte, Miquel Iceta–, iniciar la tramitación del Anteproyecto de Ley de creación de la Oficina Española de Derechos de Autor y Conexos. Un organismo autónomo que se dedicará a reforzar la actividad administrativa que corresponde al Estado en materia de propiedad intelectual.
«Es un compromiso del acuerdo de gobierno de coalición progresista, del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, y sobre todo una obligación con la industria cultural española», ha concretado el ministro de Cultura y Deporte, Miquel Iceta, en la rueda de prensa.
La propiedad intelectual constituye un pilar fundamental
Los derechos de autor y los derechos conexos son el sistema normativo clave sobre el que se sustenta el tejido de empresas y profesionales que configuran las industrias culturales. Uno de los principales activos del sector cultural español.
Tanto es así que, según la Cuenta Satélite de la Cultura, “la propiedad intelectual constituye un pilar fundamental de las Industrias Culturales y Creativas, las cuales aportan un 3,4% del PIB”. Es decir, se trata de un sector estratégico de desarrollo social y económico, así como una herramienta de cohesión social y de proyección de una imagen positiva de España en el mundo.
Por ello, el Gobierno de España ha incluido a las Industrias Culturales entre las 10 políticas palanca del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
La actividad relacionada con la propiedad intelectual ha experimentado una constante expansión
Tal y como han explicado desde la administración, durante los últimos años, los derechos de propiedad intelectual han experimentado un cambio muy rápido. Dicha evolución, se debe a la tecnología y el mercado digital. Y es que, Internet se ha convertido en el principal canal de comunicación pública y reproducción de las obras y prestaciones protegidas por derechos de autor y conexos.
Asimismo, los nuevos desarrollos de la tecnología digital, como la inteligencia artificial o las obras digitales intangibles basadas en Blockchain –NFT–, están adquiriendo una importancia cada vez más significativa en las Industrias Culturales y Creativas. Esto se debe a su creciente aplicación a la creación musical, pictórica e, incluso, a la escritura.
Por otro lado, no podemos olvidarnos de que están aflorando nuevas estrategias de piratería aprovechando la combinación de funcionalidades que ofrecen las redes sociales.
La creación de la Oficina de Derechos de Autor
«Como consecuencia de todo ello, el Estado ha ido sumando nuevas competencias y de gran calado a las ya existentes, como un mayor ámbito de supervisión y control de las entidades de gestión y de los nuevos operadores de gestión independientes», ha explicado Iceta.
A lo que ha añadido que, el objetivo es reforzar la actividad administrativa que corresponde al Estado en materia de propiedad intelectual «de manera eficaz, mejorando la estructura actual».